¿Soy feliz? ¿Qué me pasa? ¿Qué necesito? ¿Qué me perjudica?

Ser feliz con uno mismo es el camino a ser feliz en casi cualquier situación. Desarrollamos pasos hacia el camino de querernos, escucharnos y estar mejor con nosotros mismos.

Aprender a quererse

Empecemos por aprender a no maltratarnos. En muchos casos la persona que más daño nos hace y más nos critica somos nosotros a nosotros mismos.

Piensa cuántas veces te has escuchado criticarte o incluso insultarte: “mira que soy tonto”, “soy un desastre”, “soy feo”. Esto nos lleva a pensar “nadie me va a querer”, “nadie me va a contratar” … Nos creemos sin dudar esos adjetivos negativos sobre nosotros y sentimos que el resto nos verá también así. ¡ Qué fácil es creernos a veces una crítica y qué difícil puede ser aceptar un halago.!

Escuchemos y anotemos esos pensamientos negativos, pensemos de dónde vienen. Puede que piense que soy torpe, porque siempre he sido así, y luego darnos cuenta que una vez cuando éramos pequeños nos caímos de la bici, nos sentimos torpes y desde entonces cada vez que nos enfrentamos a algo nuevo ya pensamos que somos torpes y no nos va a salir…y ese pensamiento hará que efectivamente disminuya la posibilidad de conseguirlo. Si pienso… no me va a salir y no me sale…”¿ves? Soy torpe”, si sale… “no sería tan difícil, hasta yo que soy torpe he podido”

Aprender a escucharse desde el cariño

¿Cuántas veces tienes tiempo de escucharte realmente cómo estás? ¿Cuántas veces te has culpado de sentirte mal o de que un dolor no te deje hacer lo que quieres?

Nuestro cuerpo y mente nos envían señales de cómo nos encontramos tanto a nivel de molestias como de emociones. Su función no es entorpecernos ni fastidiarnos sino avisarnos de que hay algo que no va bien y nos está dañando. En muchas ocasiones no tenemos el tiempo de escucharnos, eso lo que provoca es que nuestros problemas aumenten al no darles una solución.

¿Qué pasa cuando el dolor o emoción negativa sigue aumentando y nos limita? Si optamos por seguir porque no le damos importancia o porque no aceptamos la limitación, seguirá agravándose. Sin embargo, si entendemos que son solo mecanismos de ayuda y que tenemos que escucharnos y cuidarnos y con ello buscar aquello que nos está haciendo daño para mejorar, mejoraremos.

Pegarse con uno mismo no suele ser la solución más eficaz, en cambio cuidarmos igual que cuidaríamos de aquellos que queremos y nos importan si lo es, entonces ¿por qué no nos cuidamos a nosotros mismos?